HARRISBURG, 21 de junio de 2017 - Un grupo bipartidista de senadores estatales y el secretario del Departamento Correccional de Pensilvania, John Wetzel, dieron a conocer hoy la legislación para establecer un fideicomiso público de caridad para ayudar a los niños impactados por el sistema penitenciario y revertir la dirección de los jóvenes que están en un camino que conduce al encarcelamiento en Pensilvania.
La legislación, de la que son autores los senadores estatales Vincent Hughes (D-Filadelfia, Montgomery), Pat Browne (R-Lehigh), Jay Costa (D-Allegheny) y Richard Alloway (R-Adams, Cumberland, Franklin, York), crearía el "Fondo Fiduciario Primera Oportunidad", que se utilizaría para crear becas y proporcionar subvenciones a programas que beneficien a los hijos de seres queridos encarcelados y los niños que enfrentan desafíos.
El fondo fiduciario sería administrado por la Comisión de Delincuencia y Crimen de Pensilvania y se financiaría mediante donaciones privadas deducibles de impuestos y un recargo del 1 por ciento a los proveedores que tengan un contrato con el Departamento Correccional superior a 5 millones de dólares. Otros organismos de Pensilvania también tendrían la opción de incluir una disposición similar en sus contratos. No requeriría el uso de dinero de los contribuyentes.
Los legisladores, junto con el Secretario Wetzel, destacaron la importancia de esta legislación durante una rueda de prensa celebrada hoy en el Capitolio estatal.
"Esta legislación dará a las organizaciones la capacidad de proporcionar a los niños que se enfrentan a desafíos más oportunidades educativas para ayudarles a permanecer en la escuela, darles un sentido de estabilidad y pertenencia, y protegerlos de ir por el camino equivocado", dijo el senador Hughes, presidente demócrata del Comité de Asignaciones del Senado. "Es una inversión inteligente que ayudará a los niños, a las familias y a la comunidad".
"Me complace unirme a mis colegas en la presentación de esta importante iniciativa destinada a proporcionar a nuestros jóvenes con mayor riesgo de abandono escolar o de acabar encarcelados becas y recursos que de otro modo no estarían a su disposición, en un esfuerzo por ayudarles a tener éxito tanto en la escuela como más adelante en la vida", dijo el senador Browne, presidente republicano del Comité de Asignaciones del Senado.
Inicialmente, se prevé que el fondo fiduciario genere entre 500.000 y 1 millón de dólares anuales. El fondo se destinaría a las regiones con tasas estadísticamente más elevadas de abandono escolar y riesgo de encarcelamiento.
El fondo, que sería el primero de este tipo en el país, permitirá a los jóvenes predispuestos al sistema de justicia penal acceder a los programas que necesitan para terminar sus estudios y convertirse en miembros sanos y productivos de la sociedad.
"Los niños merecen la oportunidad de crecer y prosperar y soñar con lo que les depara el futuro", dijo Costa, el líder demócrata del Senado. "Estos programas - programas que reconocen el potencial que vive dentro de cada niño, cada familia y cada comunidad - son la prueba de la oportunidad que tenemos de marcar la diferencia. Cuando invertimos en nuestros niños y nos centramos en su futuro, todos ganamos."
"Estoy muy contento de unirme al gobernador Wolf, al secretario Wetzel y a otros legisladores para dar este gran paso y proporcionar a los jóvenes las herramientas que necesitan para tener éxito", dijo el senador Alloway. "Este fondo fiduciario, que es único en la nación, proporcionará subvenciones y becas específicas sin coste alguno para los contribuyentes. Este programa será un modelo para los estados de todo el país y estoy emocionado de desempeñar un papel en la asistencia a nuestros jóvenes más necesitados."
Los niños siguen entrando en el sistema judicial a un ritmo alarmante. Además, hay más de 81.000 niños de Pensilvania con un progenitor en prisión, y aproximadamente el 65% de los reclusos del estado de Pensilvania tienen al menos un hijo, según el Departamento de Instituciones Penitenciarias.
La ausencia -que algunos psicólogos han comparado con la muerte de uno de los padres- durante los años de formación puede tener efectos deletéreos en un niño. Afrontar las consecuencias emocionales, sociales y económicas de esa pérdida puede desencadenar problemas de conducta, provocar problemas en la escuela y la posibilidad de abandonar los estudios y continuar el ciclo de la delincuencia.
"Esta legislación cambiará las reglas del juego para los muchos niños con padres en las cárceles de Pensilvania", dijo el Secretario Wetzel. "Sabemos que no terminar la escuela es muy a menudo el primer paso en la espiral descendente que conduce al encarcelamiento. Tenemos que garantizar que estos niños vulnerables en su lugar tienen una "primera oportunidad" para obtener la educación, los programas y el apoyo que necesitan para el éxito."
Representantes y estudiantes de dos organizaciones que trabajan con niños en situación de riesgo participaron en la rueda de prensa y destacaron los beneficios de invertir en programas que ofrecen a los niños una "primera oportunidad".
El club POPS (Pain of the Prison System), situado en el instituto Steelton-Highspire, ofrece a los estudiantes afectados por el dolor del sistema penitenciario -a los que tienen seres queridos encarcelados y a los que han sido encarcelados ellos mismos- apoyo comunitario y emocional, así como oportunidades para publicar los escritos y las obras de arte que crean a través del club.
"Cualquier iniciativa que haga hincapié en nuestra juventud es fundamental para el éxito futuro de nuestro mundo. Programas como POPS arrojan luz sobre el encarcelamiento y las luchas asociadas con los niños y las familias cuando un ser querido va a la cárcel", dijo la profesora de arte de POPS Jennifer Morrison. "POPS rompe el estigma y da a los niños la oportunidad de curarse, aprender y crecer a partir de la experiencia a través de la escritura creativa y las artes visuales. Creando formas de financiar programas como éste podemos garantizar que los estudiantes que pueden enfrentarse a una dificultad no se vean definidos por sus circunstancias."
Amachi Pittsburgh proporciona a los niños afectados por el encarcelamiento y a los niños que afrontan retos un camino diferente estableciendo la presencia constante de mentores cariñosos y atentos. La iniciativa se asocia con organizaciones laicas y religiosas que trabajan juntas para proporcionar mentores a los niños.
"Decenas de miles de jóvenes de Pensilvania se acostarán esta noche mientras uno de sus progenitores se acuesta en prisión. Y a muchos les preocupa si ellos también acabarán entre rejas en el futuro", declaró Anna Hollis, directora ejecutiva de Amachi Pittsburgh. "Esta legislación pionera proporciona un vehículo innovador para que los niños afectados por el encarcelamiento de sus padres tengan una primera oportunidad viable para un futuro brillante, y por eso, Amachi Pittsburgh felicita al Secretario Wetzel y a nuestros senadores estatales bipartidistas por avanzar en un esfuerzo tan monumental."
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